domingo, 7 de diciembre de 2014

POR EL RESPETO A LA VIDA


COMUNICADO DECANATO CENTRO
DIÓCESIS DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN
HUEHUETENANGO

POR EL RESPETO A LA VIDA

Las 227 Comunidades Católicas del Decanato Centro que comprenden los municipios de Aguacatán, Chiantla, Huehuetenango y Malacatancito, en torno a la celebración de la fiesta de la Inmaculada Concepción de María, Patrona de nuestra Diócesis, compartimos con toda la sociedad nuestras preocupaciones por el sufrimiento que aqueja a la población y que de manera más dura afecta a los más empobrecidos; lo hacemos movidos por el amor de Cristo que nos ha hecho comprender que el plan de Dios para con su pueblo es que todos y todas tengan vida plena y digna. (Jn. 10,10)

1.      Nos agobia la pobreza, el alto costo de la vida no permite a la mayoría de las familias contar con los satisfactores básicos, situación que se agrava por la falta de fuentes de trabajo, salarios injustos, la falta de seguridad social; una agricultura de subsistencia y sin asesoría técnica, proyectos de desarrollo que no contemplan beneficio para las comunidades sino para las empresas  y muchas de ellas extranjeras, y los medios de comunicación que bombardean con publicidad induciendo al consumo irresponsable. Pobreza que se agudiza por la falta de servicios para tener una vivienda digna: muchos no tienen agua entubada y la mayoría no es clorada, faltan sistemas de drenaje para las aguas servidas, el servicio de energía eléctrica es malo y de alto costo. Referente a la atención a la salud es escasa y de mala calidad afectada por la falta de pago de salarios y de los  suministros necesarios, de igual manera en la educación se constata falta de cobertura, que afecta más al área rural, un sistema educativo alejado de la realidad y el acceso limitado a nivel medio y diversificado y casi nada a nivel universitario; lo que si resalta es la tendencia excluyente y a la privatización.

2.      Nos entristece el desprecio a la vida, constatando una desconfianza e individualismo cada vez mayor, manteniendo con ello la discriminación, racismo y exclusión. Nos aterra el aumento de la violencia por la delincuencia común, narcotráfico, tráfico de armas, trasiego ilegal de personas, el crimen organizado, las extorsiones y la desconfianza hacia las instituciones del estado, de manera específica a las encargadas de dar seguridad y de impartir justicia. Los asesinatos, vicios y consumo de drogas, abortos, suicidios, embarazos a temprana edad, la violencia intrafamiliar y el uso irresponsable de los medios de comunicación dándole un lugar que no le corresponde a la violencia y a la pornografía.

3.      Nos indigna que nuestras autoridades sean lejanas a la vida de los pueblos a quien deben servir, y se identifiquen con intereses de partidos políticos o de grupos buscando beneficios personales: resalta la ausencia de planes de desarrollo, la corrupción, la construcción de obra gris casi exclusivamente, el clientelismo político, el tráfico de influencias, e intereses electoreros, que han politizado y corrompido a los consejos de desarrollo en todos sus niveles, los cuales están lejos de ser espacios de participación ciudadana. De igual manera la falta de espíritu de servicio en los servidores y empleados públicos de las diferentes instituciones del estado, particularmente las encargadas de dar seguridad y de impartir justicia, falseando la verdad y haciéndose cómplices de acciones y proyectos contrarios totalmente a la vida.

4.   Nos preocupa la falta de cuidado del medio ambiente, continúa la tala de árboles sin ningún control, las fuentes de agua han disminuido su caudal y la mayoría están contaminadas; la generación de basura cada vez es mayor, al punto de ser un problema grave para la administración municipal; las prácticas agrícolas inadecuadas  que producen erosión y contaminación, todo ello hacer resaltar la falta de responsabilidad con las generaciones futuras y la idea equivocada que la tierra es una mercancía y no la casa de todos.

Ante las circunstancias actuales en la vida social y política del departamento y especialmente en los municipios del decanato Centro, hacemos un llamado a valorar la vida en todas sus expresiones retomando la misión que todos y cada uno tenemos en la construcción de un Huehuetenango distinto:

1.   Al Gobernador  y a los alcaldes les pedimos que trabajen por el bien común y dediquen sus esfuerzos a crear un nuevo modelo de desarrollo que satisfaga las necesidades de los más pobres,  recuerden que es al pueblo a quien deben servir y por tanto escucharle. La obra gris, llamada por ustedes “proyectos” no es lo más importante en el desarrollo de un pueblo, sino las personas que lo conforman.

2.  A los diputados por el departamento les preguntamos: Qué han hecho por el bien de Huehuetenango? Les  exigimos que trabajen legislando y fiscalizando por el bien del país y en particular por el departamento, sin perder el tiempo el polémicas inútiles y sin caer en la tentación del dinero que compra conciencias, y les recordamos que no los elegimos para ser gestores de proyectos.

3.     Al organismo judicial les pedimos  poner verdaderamente la justicia como el principio rector de sus acciones y decisiones sin ceder a las presiones ni intereses de ninguna clase, sigan el camino de la verdad y trabajen con prontitud y esmero para que la misión que se les ha encomendado, realmente ayude a una convivencia pacífica y la población vaya recuperando la confianza en esta institución, que a todas luces ha dejado mucho que desear.

4.    A los agentes y fiscales del Ministerio Público les pedimos sean conscientes de la importancia del trabajo que se les ha encomendado, y por lo mismo les exigimos prontitud y objetividad en la investigación, y apego a la verdad sin ceder al manipuleo que los convierte en cómplices de la corrupción.

5.    A la Policía Nacional Civil les pedimos ser fieles a su identidad y misión. Ustedes tienen una familia y forman parte de esta sociedad, no se involucren en actividades ilícitas, identifíquense con el pueblo sirviendo con honradez, recuerden que tienen la obligación de garantizar la seguridad a los ciudadanos con un proceder recto y coherente con los principios morales del respeto a la vida y a la verdad.

6.      A la población en general y particularmente a las comunidades católicas les exhortamos a tener una participación ciudadana activa, valorando la organización para ser actores vigilantes y propositivos en la construcción de mejores condiciones de vida para todos y todas. Este es el momento para vencer la pasividad, la indiferencia y el silencio; si amamos la vida como Regalo de Dios, no nos es permitido seguir soportando o apoyando un sistema injusto que daña la vida de la mayoría, trabajemos incansablemente por una sociedad justa y fraterna sin recurrir a la violencia  ni a medidas de hecho que afecten los derechos de otros ciudadanos, por el contrario con audacia propongamos caminos de solución que favorezcan el bien común. Tengamos presente lo que nos ha dicho el Papa Francisco “no nos dejemos arrebatar la alegría y la esperanza”; con nuestro compromiso hacemos realidad una tierra nueva y cielos nuevos.
Confiamos en la intercesión de la Inmaculada Virgen María para que nos proteja de todo mal, y con ella pedimos a Nuestro Señor Jesucristo nos dé sabiduría, audacia y fortaleza para vivir de manera coherente con el Evangelio.

Atentamente, las 227 Comunidades Católicas del Decanato Centro, Sacerdotes del Decanato y Obispo de la diócesis de Huehuetenango.


Huehuetenango, 06 de diciembre de 2014

CONVOCATORIA MARCHA POR EL RESPETO A LA VIDA

Huehuetenango, 22 de septiembre de 2014.

Queridas Hermanas y hermanos en el Señor
Decanato Centro
Tierra de Evangelización


Les saludo con cariño y respeto en nombre de Jesucristo nuestro Señor, orando al buen Padre porque se encuentren gozando de bastante salud, trabajo y bienestar familiar.

Con mucha alegría me dirijo a ustedes con el objetivo de Convocarles: como comunidad cristiana, agentes de pastoral, familias y personas de buena voluntad; a participar en nuestra gran Marcha: “Por el respeto a la vida”, que realizaremos el día sábado 6 de diciembre del presente año, la cual iniciaremos en las inmediaciones de la Estación de los Bomberos Voluntarios, Calzada Kaibil Balam de la ciudad de Huehuetenango, a partir de las 8:00 de la mañana.

Esta caminata se enmarca en las diferentes actividades que se realizaran por la fiesta de la Inmaculada Concepción y que como decanato abarca a las 227 Comunidades Cristianas organizadas a lo largo y a lo ancho de las Parroquias de: Aguacatán, Chiantla, Huehuetenango y Malacatancito, que conformamos esta instancia eclesial.

Esta caminata está siendo organizada para que como Iglesia cumplamos nuestra misión profética: denunciar realidades que atentan contra el bien común y proponer esquemas de solución. Entre las complejas situaciones sociales que estamos viviendo podemos mencionar: un amplio cuadro de miseria y desnutrición, falta de fuentes de empleo dignas, el manoseo político de leyes que en nada benefician el campo, una campaña electoral que no respeta ni los tiempos, ni las personas, ni los patrimonios, ni la naturaleza; un sistema politiquero que enreda y corrompe los poderes del estado derivando en corrupción, inseguridad ciudadana, alimentaria, de salud y de justicia, sumiendo a la población en infames esquemas de opresión, a las que les diremos: ¡Basta ya! ¡Que respeten nuestra dignidad!

Estamos invitando a que participemos todos y todas las comunidades con entusiasmo y responsabilidad, portando camisa o blusa blanca, además de carteles con los temas sobre los cuales plantemos nuestro descontento y nuestras propuestas de caminos de solución. Cada peregrino deberá sufragar los gastos de transporte y alimentación en que se incurran. Los servicios sanitarios serán proveídos en el convento de Catedral y en Casa Miller.

La preparación de esta caminata por la vida de nuestros pueblos, inicia con la Novena de la Inmaculada Concepción, el día 29 de noviembre, en cada comunidad.

Participemos pues, con alegría pero con firmeza, para construir el Reino de Dios, en medio de nuestras realidades comunitarias, demostrando nuestro compromiso para cambiar las realidades que impiden el logro de un Huehuetenango más solidario. Dejemos pues en las manos de la Santísima Virgen María, inmaculada desde su concepción, este nuestro proyecto.

Atentamente,

P. Pablo Hernández Chum.
Decano.

miércoles, 4 de junio de 2014

VIGILIA PENTECOSTÉS




VIGILIA DE PENTECOSTÉS 

Arrancar junto a la fogata apagada.
Declamar

CON LA FUERZA DEL ESPÍRITU  de F. Ulibarri 


Donde menos lo imaginas,
cuando menos lo esperas,
donde todo es gris de tristeza,
cuando la pesadumbre pesa,
donde nadie imagina ni sueña,
cuando el horizonte se nubla...
¡es posible la vida
con la fuerza del Espíritu!

En la tierra callada,
en el surco abierto,
en el bosque perdido,
en el barro del camino,
en las montañas áridas,
en los valles secretos...
¡es posible la vida
con la fuerza del Espíritu!

En los ojos que miran,
en las manos que aprietan,
en las palabras no dichas,
en las entrañas que gimen,
en los regazos que acunan,
en tu corazón cambiante...
¡es posible la vida
con la fuerza del Espíritu!




Encender la fogata y proyectar el canto Ven Espíritu.

Canto de Entrada.
Cirio Encendido.
Entrar en Procesión a la Virgen y la Biblia.

Monición Inicial.

* Vigilia viene del verbo "velar", "estar despierto". Una vigilia es fundamentalmente una noche de vela, una noche de oración, de espera, de preparación de un acontecimiento. La tarde-noche tiene algo especial para la oración. Jesús mismo pasaba las noches en oración, o se levantaba al amanecer.

* Lo fundamental de la Vigilia es escuchar la Palabra de Dios, la meditación y la oración durante un tiempo considerable. De esta manera el pueblo cristiano se prepara para celebrar acontecimientos de salvación. En la oración nos abrimos para acoger la acción de Dios y para disponernos a secundar lo que Dios nos pide.

* La vigilia de Pentecostés es culminación del tiempo pascual. Jesús resucitado deja su Espíritu y la Iglesia naciente inicia una nueva etapa continuando la obra emprendida por su Señor.

* Pentecostés no es una fiesta aislada. La Pascua dura cincuenta días. Pentecostés es tiempo de plenitud, de tomar conciencia de lo que somos por la fuerza del Espíritu. En este tiempo, María tiene también un sitio. Ella estaba allí, reunida con los Apóstoles asistiendo al nacimiento de la
Iglesia.


Saludo Inicial – Señal de la cruz.

Bienvenidos a esta celebración de la vigilia de Pentecostés: Que la fuerza del Resucitado los inunde con su energía poderosa, los vigorice en sus luchas y los consuele en sus sufrimientos. El Señor esté con ustedes.

Después recitamos todos juntos la siguiente oración:



Ven, Espíritu divino,
tu luz manda desde el cielo.
Padre amoroso del pobre;
don en tus dones espléndido;
luz que penetra las almas;
fuente del mayor consuelo.

Ven, dulce huésped del alma,
descanso de nuestro esfuerzo,
tregua en el duro trabajo,
brisa en las horas de fuego,
gozo que enjuga las lágrimas
y reconforta en los duelos.

Entra hasta el fondo del alma,
divina luz, y enriquécenos.

Mira el vacío del hombre
si tú le faltas por dentro;
mira el poder del pecado
cuando no envías tu aliento.

Riega la tierra en sequía,
sana el corazón enfermo,
lava las manchas,
infunde calor de vida en el hielo,
doma el espíritu indómito,
guía al que tuerce el sendero.

Reparte tus siete dones
según la fe de tus siervos.
Por tu bondad y tu gracia
dale al esfuerzo su mérito;
salva al que busca salvarse
y danos tu gozo eterno.
AMÉN.



Introducción a la reflexión-oración del grupo

El Espíritu de Jesús no tiene un mensaje distinto que decirnos que el de Jesús. Es quien nos recuerda lo que Jesús nos dijo, la sustancia de su mensaje. Y eso es precisamente lo que a continuación vamos a tratar de hacer. Que nos traiga el recuerdo de la letra del Evangelio... El Espíritu que ha sido derramado en nuestros corazones se une a nuestro propio espíritu y nos hace sintonizar y vibrar ante el núcleo de la llamada de Jesús. Dejemos que el Espíritu nos enseñe todo, nos conduzca a la verdad a nosotros que queremos caminar hacia ella; nos ayude a interpretar los signos de los tiempos.

A continuación se explica el modo de orar que vamos a realizar:

Un joven presentará un don mediante un CARTEL y se prende una vela; se leen los textos adecuados a cada don, y tras un momento de reflexión los participantes, hacemos oración en torno a ese don para nosotros o para alguna persona que sepamos que la necesita.

Conviene no ser excesivamente largo ni tedioso en la presentación de cada don (3 minutos por c/u más o menos).

Textos para acompañar la oración

1. SEÑOR, DANOS EL DON DE LA SABIDURÍA.

Se pone un cartel y se prende una vela
Así con cada uno de los dones.

Este don, que Tú regalas, Señor, es el don del buen gusto en las cosas. El saber discernir, disfrutar, agradar. La espontaneidad con Dios y la familiaridad con los hombres. La facilidad de moverse con soltura en cualquier ambiente. Saber gustar donde la gente se intoxica; saber disfrutar donde todo el mundo tiene prisa por llegar a donde nunca llega y hacer lo que nunca hace.
El don de vivir y apreciar la vida. Por la sabiduría, que es un don que se aprende con el corazón,
saboreamos y gustamos lo bueno que es el SEÑOR. Por esta sabiduría aceptamos TODO lo que en nuestra vida pasa, viendo en todos los acontecimientos la historia de amor que Dios va escribiendo junto a nosotros: nuestra propia historia.

CANTO

2. DANOS, SEÑOR, EL DON DEL ENTENDIMIENTO.
Con este don, Señor, podemos leer por dentro, estudiar a fondo, llegar al corazón de las cosas.
Por el don del entendimiento llegamos a calar en el sentido y en el por qué de las cosas y de nuestra propia vida, a veces tan difícil de entender.
Por este don nos hacemos capaces de sorprendernos gratamente con las personas que nos rodean. Ellas, como son, nos son entregadas como don de Dios. Por este don del entendimiento
podemos reconocer la mano de Dios donde otros sólo ven casualidades. Con este don del entendimiento, en definitiva, vemos con los ojos de Dios.

Invoquemos a María para que nos ayude a ver como ella veía a Jesús. “Dios te salve…”



3. SEÑOR, DANOS EL DON DEL CONSEJO.
Por este don Tú nos ayudas a vivir y nos ayudas a tomar las verdaderas y más importantes decisiones que afectan a nuestra vida y a la vida de los demás, porque la vida tiene sentido cuando se entrega. Es escuchar atento y callado cuando alguien nos cuenta sus desánimos y sus confusiones, creando un espacio en el que, el que habla, pueda entrar en sí mismo y encontrar la salida más adecuada a lo que le preocupa. Este don del consejo es el que nos une unos a otros
para buscar conjuntamente, y para animarnos en el camino que nos lleva hacia Ti.

CANTO

4. SEÑOR, DANOS EL DON DE LA FORTALEZA.
Con este don, Tú nos das, Señor, el valor, la constancia y la perseverancia. Porque la vida no puede vivirse a pedazos, hay que definirse, hay que “tirarse al agua”; y para eso necesitamos la tenacidad y la fortaleza. Necesitamos este don para hacer frente a tantas cosas que nos quieren apartar del proyecto de Dios; y no tanto cosas fuera de nosotros, que también las hay, sino cosas que dentro de nosotros están luchando y tratando de apartarnos de la fidelidad al plan de Dios.
Un don para que no seamos gente que empieza y nunca sigue ni termina el camino del bien empezado. Constancia y perseverancia para alcanzar, ayudados por Dios,
la santidad a la que Él nos llama.
 Oremos por personas y situaciones que necesiten fortaleza.

5. SEÑOR, DANOS EL DON DE LA AUDACIA.
Derrama, Señor, entre nosotros tu Espíritu de audacia. Que nos de fuerza y valentía para anunciar el Evangelio sin miedos, ni complejos.
El Espíritu que nos libre de la cobardía y nos transforme en testigos arriesgados y audaces para repetir con María a todos: “hagan lo que él les diga”

CANTO

6. SEÑOR, DANOS EL DON DE PIEDAD.
El don de sentirnos hijos de Dios.
Sentir ternura, admiración y afecto hacia Dios como Padre, y sentirnos hermanos de los demás y amarlos, porque Dios mismo nos los ha dado como hermanos.
El don de piedad por el que sabemos vivir profundamente la amistad.
Tener amigos con los que compartir lo que somos; para poder abrir nuestro corazón y descansar en la confianza.
Un don, sobre todo, por el que podemos llamar y sentir a Dios como padre, y por el que nos atrevemos a llamarlo cariñosamente Papá.

Silencio…

7. SEÑOR, DANOS EL DON DEL TEMOR DE DIOS.
Un temor que no tiene nada que ver con el miedo.
Es un sentimiento profundo por el que valoramos de tal manera el don del amor que Dios nos da,
-que es lo mismo que darse a sí mismo, porque es amorque tememos perderlo, como tememos perder el tesoro más precioso que tengamos. Un don que nos lleva a respetar y reverenciar a Dios,
porque sabemos que Dios es Dios, y es el que sabe lo que nos hace falta y nos conviene.

Después se canta o escucha: "Si tu no vienes…" (de Meana)


Lectura de los Hechos de los Apóstoles (2, 1-11)

Reflexión: 

"EL ESPÍRITU SANTO ES EL CONDUCTOR DE LA UNIDAD.

El Espíritu Santo es el fundamento de la unidad de la Iglesia. Él realiza la comunión de todos los creyentes y une a todos en Cristo. Hace que la Iglesia sea una y tienda siempre a la unidad. Esta unidad no se opone a la diversidad que enriquece a la Iglesia, gracias a la variedad de dones y carismas que distribuye el mismo Espíritu.
El Espíritu Santo asegura los vínculos visibles de la comunión que garantizan que la Iglesia sea una:
* La profesión de una misma fe,
* La celebración común del culto divino, sobre todo de los sacramentos.
* La suceción apostólica por medio del sacramento del orden.
Pero no debemos olvidar que si bien la acción del Espíritu Santo construye la unidad de la Iglesia, siempre se requiere de parte del creyente, la conversión del corazón, la oración en común y la formación ecuménica."  Diócesis de Huehuetenango.


CREDO

-CELEBRANTE: Nadie de nosotros puede decir "creo" si no es por el Espíritu de
Jesús que está en nosotros. En esta Vigilia de Oración recordamos la Vigilia pascual
y con la fuerza del Espíritu confesamos:

* ¿ Por la fuerza del Espíritu confiesan Creer en Dios, Padre, creador del cielo y tierra?
(Todos): Si Creo en Dios.
* ¿ Por la fuerza del Espíritu confiesan Creer en Jesucristo, Hijo de Dios, enviado desde el Padre, ungido por el Espíritu y resucitado de la muerte?
(Todos): Si Creo en Jesucristo.
* ¿ Por la fuerza del Espíritu confiesan Creer en el Espíritu, Señor y dador de vida, fuerza que todo lo recrea?
(Todos): Si creo en el Espíritu santo, Señor y dador de vida.

ORACIÓN DE LOS FIELES

-CELEBRANTE: Esta es la fe de la Iglesia. En ella vemos la acción del espíritu
de Dios y proclamamos ante los hombres que Dios nos quiere y que Dios nos libera, a cada invocación respondemos: Envía tu Espíritu, Señor, y renueva la faz de la tierra.

• Para que la Iglesia sea lugar de verdad.
(Todos): Envía tu Espíritu, Señor, y renueva la faz de la tierra
• Para que los que sufren se sientan confortados
• Para que los que dudan sean confirmados en la verdad
• Para que los que buscan encuentren
• Para que los descarriados vuelvan
• Para que los que vacilan sean orientados
• Para que los que no ven vean
• (Espontáneas...)

DESPEDIDA
a. Padrenuestro (Celebrante):

Recitar el Padre nuestro es un signo de la presencia del Espíritu en medio de la comunidad y en cada uno de nuestros corazones. Recuerden: "Nadie puede decir Jesús es Señor sin la fuerza del Espíritu". Por este Espíritu que reza en nosotros, nosotros podemos rezar: Padre nuestro...

b. Gesto de la Paz
-Mientras el Celebrante va asperjando con agua a todos, se intercambian signos de paz y se canta

c. Oración final
Señor, tú que fecundas la creación entera con tu aliento de vida: santifica a los que formamos tu Iglesia con el fuego que tu Hijo ha dejado prendido en la tierra.
Concede la unidad de corazón a quienes vivimos de una misma fe, para que al unísono podamos alabarte como la única fuente de la que manan todos los dones.
Concédenos adentrarnos en el silencio y en la oración para recibir en nosotros con docilidad y alegría la fuerza del Espíritu de tu Hijo, que hoy, como un nuevo Pentecostés quiere derramarse sobre nosotros.
Te lo pedimos por Jesucristo, tu Hijo y nuestro Señor.

Dios Todopoderoso nos bendiga en nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo. AMEN.

CANTO FINAL.

jueves, 24 de abril de 2014

Hora Santa Santa Cruz

HORA SANTA,
COMUNIDAD SANTA CRUZ 2014

MONICION DE ENTRADA:
Buenas noche hermanas y hermanos, sean bienvenidos a nuestra HORA SANTA PASCUAL EN EL AÑO DE LA FE, en medio de la Novena por la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, patrona de nuestra comunidad. Dispongamos la mente, el corazón y los sentidos para acompañar a Cristo en esta Hora, para bendecir su nombre y nuestras vidas; poniendo en sus manos misericordiosas la vida comunitaria y parroquial, implorando al buen Señor por la salud para nuestros enfermos y su inspiración divina para nuestros proyectos e ilusiones.

PUESTOS DE RODILLAS Y ACOMPAÑANDO AL CORO RECIBIMOS AL SANTISIMO SACRAMENTO

CANTO  (Se lo recibe con un canto apropiado que conozca la comunidad, por ejemplo “Alabado sea el Santísimo”)

EXPOSICIÓN 
El sacerdote revestido expone el Santísimo Sacramento como de costumbre, y realiza los ritos iníciales.

Señor Jesús:
Nos presentamos ante ti sabiendo que nos llamas y que nos amas tal como somos.
"Tú tienes palabras de vida eterna y nosotros hemos creído y conocido que tú eres el Hijo de Dios" (Jn. 6,69).
Tu presencia en la Eucaristía ha comenzado con el sacrificio de la última cena y continúa como comunión y donación de todo lo que eres.
Aumenta nuestra FE.
Por medio de ti y en el Espíritu Santo que nos comunicas, queremos llegar al Padre para decirle nuestro SÍ unido al tuyo.
Contigo ya podemos decir: Padre nuestro.
Siguiéndote a ti, "camino, verdad y vida", queremos penetrar en el aparente "silencio" y "ausencia" de Dios, rasgando la nube del Tabor para escuchar la voz del Padre que nos dice: "Este es mi Hijo amado, en quien tengo mi complacencia: Escuchadlo" (Mt. 17,5).
Con esta FE, hecha de escucha contemplativa, sabremos iluminar nuestras situaciones personales, así como los diversos sectores de la vida familiar y social.
Tú eres nuestra ESPERANZA, nuestra paz, nuestro mediador, hermano y amigo.
Nuestro corazón se llena de gozo y de esperanza al saber que vives "siempre intercediendo por nosotros" (Heb. 7,25).
Nuestra esperanza se traduce en confianza, gozo de Pascua y camino apresurado contigo hacia el Padre.
Queremos sentir como tú y valorar las cosas como las valoras tú. Porque tú eres el centro, el principio y el fin de todo.
Apoyados en esta ESPERANZA, queremos infundir en el mundo esta escala de valores evangélicos por la que Dios y sus dones salvíficos ocupan el primer lugar en el corazón y en las actitudes de la vida concreta.
Queremos AMAR COMO TÚ, que das la vida y te comunicas con todo lo que eres.
Quisiéramos decir como San Pablo: "Mi vida es Cristo" (Flp. 1,21).
CANTO

Nuestra vida no tiene sentido sin ti.
Queremos aprender a "estar con quien sabemos nos ama", porque "con tan buen amigo presente todo se puede sufrir". En ti aprenderemos a unirnos a la voluntad del Padre, porque en la oración "el amor es el que habla" (Sta. Teresa).
Entrando en tu intimidad, queremos adoptar determinaciones y actitudes básicas, decisiones duraderas, opciones fundamentales según nuestra propia vocación cristiana.
CREYENDO, ESPERANDO Y AMANDO, TE ADORAMOS con una actitud sencilla de presencia, silencio y espera, que quiere ser también reparación, como respuesta a tus palabras: "Quedaos aquí y velad conmigo" (Mt. 26,38).
Tú superas la pobreza de nuestros pensamientos, sentimientos y palabras; por eso queremos aprender a adorar admirando el misterio, amándolo tal como es, y callando con un silencio de amigo y con una presencia de donación.
El Espíritu Santo que has infundido en nuestros corazones nos ayuda a decir esos "gemidos inenarrables" (Rom. 8,26) que se traducen en actitud agradecida y sencilla, y en el gesto filial de quien ya se contenta con sola tu presencia, tu amor y tu palabra.
En nuestras noches físicas y morales, si tú estás presente, y nos amas, y nos hablas, ya nos basta, aunque muchas veces no sentiremos la consolación.
Aprendiendo este más allá de la ADORACIÓN, estaremos en tu intimidad o "misterio".
Entonces nuestra oración se convertirá en respeto hacia el "misterio" de cada hermano y de cada acontecimiento para insertarnos en nuestro ambiente familiar y social y construir la historia con este silencio activo y fecundo que nace de la contemplación.
Gracias a ti, nuestra capacidad de silencio y de adoración se convertirá en capacidad de AMAR y de SERVIR.
Nos has dado a tu Madre como nuestra para que nos enseñe a meditar y adorar en el corazón. Ella, recibiendo la Palabra y poniéndola en práctica, se hizo la más perfecta Madre.
Ayúdanos a ser tu Iglesia misionera, que sabe meditar adorando y amando tu Palabra, para transformarla en vida y comunicarla a todos los hermanos.
Amén.
Beato Juan Pablo II

CANTO (Cantemos al amor de los amores)

En cada monición participamos diciendo
 R/. Te adoramos y creemos en ti. 
* Jesucristo verdaderamente presente en la Eucaristía
 R/. Te adoramos y creemos en ti.

 *Jesucristo realmente presente en la Eucaristía 

*Jesucristo sustancialmente presente en la Eucaristía. 

*Jesús, remedio del pecado, sosiego de las pasiones, árbol que nos das la vida. 

*Jesús, Nuevo Maná bajado del cielo, origen de toda gracia, Cordero Pascual que quitas el pecado del mundo. 

*Jesús, fuerza de los apóstoles, esposo de las almas vírgenes, viático de los moribundos, Rey de todos los pueblos. 

*Jesús, verdadero Dios y verdadero hombre, Salvador del mundo, siempre vivo para interceder por nosotros.

Canto


TIEMPO DE MEDITACIÓN 
SENTADOS

Lectura de la primera carta del Apóstol San Pedro

1, 3-9  
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo quien, por su gran misericordia, mediante la Resurrección de Jesucristo de entre los muertos, nos ha reengendrado a una esperanza viva, a una herencia incorruptible, inmaculada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, a quienes el poder de Dios, por medio de la fe, protege para la salvación, dispuesta ya a ser revelada en el último momento. Amor y fidelidad hacia Cristo. Por lo cual rebosáis de alegría, aunque sea preciso que todavía por algún tiempo seáis afligidos con diversas pruebas, a fin de que la calidad probada de vuestra fe, más preciosa que el oro perecedero que es probado por el fuego, se convierta en motivo de alabanza, de gloria y de honor, en la Revelación de Jesucristo. A quien amáis sin haberle visto; en quien creéis, aunque de momento no le veáis, rebosando de alegría inefable y gloriosa; y alcanzáis la meta de vuestra fe, la salvación de las almas..Palabra de Dios.

CANTO



PUNTOS PARA LA MEDITACIÓN.

Su Santidad Francisco
Audiencia general, 10 de abril de 2013

¿Qué significa la Resurrección para nuestra vida? ¿Y por qué sin ella es vana nuestra fe? Nuestra fe se basa en la muerte y resurrección de Cristo,(…) es con la Resurrección que vence a la muerte, la pone a un lado y nos abre el camino para renacer a una nueva vida.
Con la resurrección de Jesús llega algo nuevo: somos liberados de la esclavitud del pecado y nos volvemos hijos de Dios, somos engendrados por lo tanto a una vida nueva. ¿Cuándo se realiza esto para nosotros? En el Sacramento del Bautismo, sumergiéndose en la muerte y resurrección de Cristo, nos hemos convertido en hijos de Dios.

Breve Silencio (1 min)

Nuestro Dios, es un padre para nosotros. Es Dios que nos trata como hijos, nos comprende, nos perdona, nos abraza, nos ama aun cuando cometemos errores. Esta relación filial con Dios no es como un tesoro que guardamos en un rincón de nuestras vidas, sino que debe crecer, debe ser alimentado cada día por la escucha de la Palabra de Dios, la oración, la participación en los sacramentos, especialmente de la Penitencia y de la Eucaristía, y de la caridad. ¡Podemos vivir como hijos!

CANTO


Estar resucitados con Cristo por el bautismo, con el don de la fe, para una herencia que no se corrompe, nos lleva a buscar aún más las cosas deDios, a pensar más en Él, a rezarle más. Ser cristiano no se reduce a seguir órdenes, sino que significa estar en Cristo, pensar como él, actuar como él, amar como Él; es dejar que él tome posesión de nuestra vida y que la cambie, la transforme, la libere de las tinieblas del mal y del pecado.

Breve Silencio (1 min)




(De Rodillas)
Invoquemos a nuestro Redentor, que con su resurrección confirmó su victoria en la cruz diciendo:

Por tu cruz y resurrección, sálvanos, Señor


- Hijo de Dios, que, por la señal de la serpiente de bronce, sanaste al pueblo de Israel, protégenos hoy de la mordedura del pecado, oremos:

- Hijo del hombre, que fuiste elevado en la cruz, como Moisés elevó la serpiente en el desierto,  elévanos a la felicidad de tu reino, oremos:

- Hijo unigénito del Padre, que fuiste dado al mundo para que todo el que crea en ti no perezca, concede la vida eterna a los que buscamos tu rostro, oremos:

- Hijo amado del Padre, que has sido enviado al mundo, no para condenarlo, sino para que se salve por ti, da la fe a nuestros parientes para que no perezcan, oremos:

- Hijo eterno del Padre, que viniste a prender fuego en el mundo y deseaste que estuviera ya ardiendo,  haz que realicemos la verdad y nos acerquemos así a la luz, oremos.
En la cruz está la vida y el consuelo
y ella sola es el camino para el cielo.

En la cruz está el Señor de cielo y tierra,
y el gozar de mucha paz, aunque haya guerra;
todos los males destierra en este suelo,
y ella sola es el camino para el cielo.
Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos
Porque con tu santa Cruz has redimido al mundo.

(de pie)

Llenos de alegría por ser hijos de Dios, recemos en nuestra oración con las palabras que el mismo Señor nos enseñó, pidiendo por la Iglesia, por el Santo Padre, por los sacerdotes, por los jóvenes y niños, por todos aquellos que sufren o pasan alguna necesidad, por las familias cristianas, por todos los hombres, por nuestras necesidades
Padre Nuestro…

(De rodillas)

Ritos finales

BENDICIÓN Y RESERVA

martes, 22 de abril de 2014

Novena Santa Cruz Con Reflexiones Juan Pablo II


NOVENA A LA SANTA CRUZ

(Con reflexiones del Beato Juan Pablo II)

De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz,
Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús,
Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.

3º Salutación Primer día
Te saludo Cruz Santísima con todos los coros Celestiales, y doy al Señor junto a ellos infinitas gracias, porque se dignó en honrarte, haciendo de ti Trono de su Majestad divina para remedio del mundo, crédito de sus milagros, y reparo de aquella primera caída de Adán. Alabada seas por siempre. Amén.

4º La Palabra: 1ª. Co. 1, 17

5º Reflexión:
Si la vida se vacía de la Cruz no tiene ya sentido, sabor ni valor. Quien intentase cerrar las páginas del Evangelio que documentan el trágico epílogo de la vida terrena de Jesús, anhelando un Evangelio más fácil, más cómodo, más conforme con un modo acomodaticio de la vida, reduciría el Evangelio de Jesús a un documento del pasado, a una palabra inerte, a una narración sin vida y sin capacidad de salvación. El Señor ha salvado al mundo con la Cruz; ha devuelto a la humanidad la esperanza y el derecho a la vida con su muerte. No se puede honrar a Cristo si no se le reconoce como Salvador, si no se reconoce el misterio de su Santa Cruz. (Beato Juan Pablo II)

6º Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.

Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.

NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz,
Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús,
Para darme eterna luz,
Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Tercer día
Te Saludo Cruz Santísima, con todos los Santos Patriarcas, y doy al Señor con ellos gracias, porque se dignó en honrarte, queriendo que fuese adorada por las gentes; y lo que es más, de la Reina de los Ángeles con aquella adoración que solo se debe a su Majestad Santísima, Alabada seas por siempre. Amén.
4º La Palabra: 1ª. Co. 1, 18
5º Reflexión:
«Os digo hoy: seguid sin cansaros el camino emprendido para ser por doquier testigos de la Cruz gloriosa de Cristo. ¡No tengáis miedo! Que la alegría del Señor, crucificado y resucitado, sea vuestra fuerza, y que María Santísima esté siempre a vuestro lado» (Beato Juan Pablo II)
Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.




NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz, Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús, Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Cuarto día
Te Saludo Cruz Santísima, con todos los Santos profetas, y doy al Señor con ellos gracias, porque se dignó de honrarte, poniendo en ti el fundamento de la peregrina Iglesia adornada de los siete Sacramentos, y demás misterios, que en tu virtud veneramos. Alabada seas por siempre.. Amén.
4º La Palabra:  Mt. 16, 24
5º Reflexión:
 (Beato Juan Pablo II)
Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.


NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz, Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús, Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Quinto día
Te Saludo Cruz Santísima, con todos los Santos Apóstoles, y doy al Señor gracias, porque se dignó de honrarte, haciendo que en tu virtud se conviertan tantas almas, así de obstinados pecadores, como de apóstatas y gentiles, que alumbrados con tu luz; se arrepienten de sus errores, confesando una Fe, un Bautismo, una Iglesia, una verdadera Ley y un Dios y Señor de todo. Alabada seas por siempre. Amén.
4º La Palabra: Mt. 27,32
5º Reflexión:
La fe y el obrar moral están unidos. En efecto, el don recibido nos conduce a una conversión permanente para imitar a Cristo y recibir las promesas divinas. Los cristianos, por respetar los valores fundamentales que configuran una vida limpia, llegan a veces a sufrir, incluso de modo heroico, marginación o persecución, debido a que esa opción moral es opuesta a los comportamientos del mundo. Este testimonio de la cruz de Cristo en la vida cotidiana es también una semilla segura y fecunda de nuevos cristianos. Una vida plenamente humana y comprometida con Cristo tiene ese precio de generosidad y entrega. (Beato Juan Pablo II)
6º Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.


NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz, Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús, Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Sexto día
Te Saludo Cruz Santísima, con todos los Santos Evangelistas, y doy al Señor con ellos gracias, porque se dignó en honrarte, haciendo que en tu virtud se salven un sin número de almas, siendo tú la llave maestra que a todos les abres el Paraíso, para gozarse en la gloria, cantando a Dios alabanzas por toda la eternidad. Amén.
4º La Palabra:  Fil. 2, 8
5º Reflexión:
La cruz significa: entregar la vida por el hermano para poder salvarla junto con la suya.
La cruz significa: el amor es más fuerte que el odio y la venganza; es mejor dar que recibir; la entrega es más eficaz que la exigencia.
La cruz significa: no hay fracaso sin esperanza, sombras sin luz, tormenta sin puerto de salvación.
La cruz significa: el amor no tiene fronteras: sal al encuentro de tu prójimo y no olvides al que está lejos.
La cruz significa: Dios es siempre más grande que nosotros los hombres; más grande incluso que nuestro fracaso; la vida es más fuerte que la muerte. (Beato Juan Pablo II)
6º Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.


NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz, Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús, Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Séptimo día
Te saludo Cruz Santísima, con todos los Santos Mártires y doy al Señor con ellos gracias, porque se dignó en honrarte, queriendo que en tu invención milagrosa se halle el más precioso tesoro que venera nuestra Fe, suscitando en él sus antiguas maravillas, con destrucción de los ídolos, confusión de los gentiles, y crédito de su loable providencia que seas alabada para siempre. Amén.
4º La Palabra:  Lc. 9,23
5º Reflexión: Así como la cruz no es algoextraño en Roma, tampoco lo es para la vida de todo hombre y mujer de cualquier edad, pueblo y condición social… Sí, la cruz está inscrita en la vida del hombre. Querer excluirla de la propia existencia es como querer ignorar la realidad de la condición humana. ¡Es así! Hemos sido creados para la vida y, sin embargo, no podemos eliminar de nuestra historia personal el sufrimiento y la prueba… Una difundida cultura de lo efímero, que asigna valores sólo a lo que parece hermoso y a lo que agrada, quisiera haceros creer que hay que apartar la cruz. Esta moda cultural promete éxito, carrera rápida y afirmación de sí a toda costa; invita a una sexualidad vivida sin responsabilidad y a una existencia carente de proyectos y de respeto a los demás. Abrid bien los ojos, queridos jóvenes; este no es el camino que lleva a la alegría y a la vida, sino la senda que conduce al pecado y a la muerte. Dice Jesús: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame... (Beato Juan Pablo II)
6º Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria) v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos, r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.

NOVENA A LA SANTA CRUZ
De rodillas en presencia de la Santísima Cruz, habiéndote persignado, dirás:
Te Adoro Santa Cruz, Puesta en el Monte Calvario,
En ti murió mi Jesús, Para darme eterna luz, Y librarme del enemigo.
2º Acto de Contrición.
Señor mío Jesucristo; que con tu contacto santificaste el madero de la Cruz, para lavar con ella y con tu sangre preciosa las manchas de mis pecados; me pesa de todo corazón las ofensas que contra ti he cometido en mi vida; me propongo apartarme del mal y espero en tu piedad infinita, el perdón.
3º Salutación
Octavo día
Te saludo Cruz Santísima, con todos los Santos Confesores, y doy al Señor con ellos gracias, porque se dignó en honrarte, obrando por tu signo aquel admirable triunfo que consiguió sobre el demonio, quedando éste confundido y glorificada la Majestad verdadera, que seas ahora y siempre venerado en la Santísima Cruz. Amén.
4º La Palabra: 1 Pe. 2, 24
5º Reflexión:
La cruz con Cristo es la gran revelación del significado del dolor y del valor que tiene en la vida y en la historia. Él que comprende la cruz, el que la abraza, comienza un camino muy distinto del camino del proceso y de la contestación a Dios: encuentra, más bien, en la cruz el motivo de una nueva ascensión a Él por la senda de Cristo, que es precisamente el Vía Crucis, el camino de la cruz… Pidamos al Redentor, en nombre de su cruz, que conceda a su Iglesia y a toda la humanidad la gracia del Año Santo, los dones de conversión y de santidad que tanto necesitamos. Esto quiere el Año Santo, esto nos pide Jesús desde la cruz: una apertura mayor a su redención con el arrepentimiento de los pecados y la aspiración a la santidad. (Beato Juan Pablo II)
6º Antífona
O Cruz Santísima, más resplandeciente que todas las estrellas y más Santa que todos los Santos. Para el mundo: célebre, para los hombres: amable; que sola fuiste digna de contener en tu madero todo el rescate del mundo: Dulce Árbol, dulces Clavos, dulces penas que tolerada en ti por mi Señor Jesucristo, fueron el remedio nuestro: Salva a todos los Cristianos, que en este día repiten tus Alabanzas. (Se dicen Padre Nuestro y Gloria)
            v) Te adoramos Oh Cristo y te bendecimos,
            r) Que por tu Santa Cruz redimiste el mundo y a mí que soy pecador.
Oración para todos los días de la novena
O Cruz Santísima, la más noble entre todos los árboles frondosos, que hermoseas el Jardín ameno de la peregrina Iglesia; reino del Padre, Cetro del Hijo, sello del Espíritu Santo; honra y gloria del mismo Crucificado, crédito de las maravillas de Dios, trono sagrado del Omnipotente Rey, árbol de la vida, y fuente de la Bienaventuranza: Te Adoro, Te bendigo, Te alabo, y doy gracias a Dios, poniendo debajo de tus misteriosos brazos a nuestras familias, a nuestros enfermos y nuestros proyectos e ilusiones con todas las de la Iglesia, para que por tu virtud se digne el Señor conducirlas, si ha de ser para servirle, bien de mi alma, aumento de la virtud y crédito de ti mismo, que es lo que más deseo; y sobre esto una acertada, feliz y dichosa muerte, y que por ti me reciba el que por ti se dignó en redimirme, que es mi Señor Jesucristo, que con el Padre, y el Espíritu Santo viven y reinan por todos los siglos de los siglos. Amen.
(Se dice Un Ave María a la Santísima Virgen de los Dolores, y la oración siguiente.)
Soberana Reina de los Cielos, que al pié de la Santísima Cruz sufriste tan agudos dolores, y por designio divino quedaste constituida madre de todas las criaturas, dígnate, afligidísima Señora, en patrocinar nuestras peticiones, y socorrer las necesidades de nuestras almas. Te prometemos no apartarnos ya de la Cruz, y acompañarte siempre en tus dolores, sintiendo en el corazón las penas que te causé con mis pecados; para que así consigamos, con tu amparo, y por el Santo Madero de la Cruz, los frutos de la redención, que en ella obró tu Hijo Jesús. Amen.
Nota: Día Segundo: Hora Santa; Día Noveno: Rezadito.